La Asociación Madres
de Plaza de Mayo se dirige a: el presidente de EE.UU., el pueblo
norteamericano, los integrantes de la OTAN, las N.U., la OEA; los
integrantes del Vaticano; el parlamento Europeo, el knesset (parlamento
Israelí), para que escuchen nuestro grito:
¡No
a la Guerra! ¡No a la Masacre que Genera la Guerra! ¡No a la Venganza!
¡No a un Nuevo Genocidia!
La suerte del mundo no
puede quedar en las exclusivas manos del imperialismo norteamericano.
En nombre del interés y el valor que tiene la vida para la humanidad,
todos debemos decir No a la Guerra. A la responsabilidad
de EE.UU. en todas las dictaduras de Latinoamérica donde se asesinó
a más de 150 mil hombres y mujeres, no se le respondió con venganza,
se pidió y se pide justicia. Las madres de todos los países latinoamericanos
saben que el genocidio fue la aplicación de planes económicos que
trajeron a nuestros pueblos hambre, desocupación, miseria y muerte.
EE.UU. y los países que
integran la OTAN tienen el armamento más sofisticado, armas químicas
y misiles de alcance incalculable. Todos saben que las consecuencias
que el uranio empobrecido de las guerras deja en el suelo, los pueblos
las pagan años y años. La prepotencia del presidente Bush raya en
la locura. Un solo hombre no puede ni debe poner a toda la humanidad
en peligro. Por los niños, por las madres, por todos: No a la
Guerra.
Hebe de Bonafini, Presidenta
Juana de Pargament, Tesorera
Mercedes de Meroño, Vicepresidenta
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